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Testimonios | |||||||
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Testimonio de Protección
Buen día hermanos Víctor y Sylvia; y Congregación de Vino Nuevo. Doy gracias a Dios mi Señor, a Cristo mi Salvador y al Espíritu Santo mi ayudador y fortaleza, por haberme protegido y liberado; después de que un comando de la Policía Federal, en un retén, me privara de la libertad junto con un compañero de trabajo. Bajo el presunto delito o falta, de que el permiso para circular del automóvil de mi amigo era falso, cosa que desconozco ya que nunca nos dieron pruebas o fundamentos basados en hechos reales de que así fuera, el detalle es que, me retuvieron por casi 6 horas en un cuartel de la P.E.P.; y como están las cosas en nuestra amada Cd. Juárez, la verdad yo pensaba lo peor, que quizá nos iban a incriminar por algo mayor, o yo que sé.
La mayor parte del tiempo que pasé ahí, me quitaron mis teléfonos celulares, pero antes de entrar al lugar, pude avisar a mi esposa, ella y mis hijos eran lo que más me preocupaba. Pensaba en lo que estarían sufriendo al no saber nada de mí.
Hace un año sufrimos la terrible desaparición de un hermano de mi esposa, en circunstancias muy sospechosas, ya que los secuestradores nunca pidieron rescate y los testigos comentan que vieron a policías federales al momento de su secuestro. Y me consta el dolor y angustia que pasó la familia entera, especialmente mi esposa. En mi desesperación, sólo le pedía a mi Dios que no se repitiera la historia y que tuviera misericordia de mis hijos y mi esposa. Afortunadamente, Dios ya estaba obrando en poder y favor para con nosotros, ¡Él siempre está en control de todo! “TODO OBRA PARA BIEN...”, dice la Palabra.
Después de la primera hora de haber sido detenido por la policía, ya había una guerra espiritual a mi favor, ya que muchas personas estaban orando y ayudando a mi esposa. Fue un tiempo de interrogatorios tediosos, ya que simplemente querían saber quien era yo a que me dedicaba y por qué había tanta gente interesada en mi paradero. Siempre respondí con honestidad y creo que al ver ellos que era sincero en mis palabras me dejaron en paz. Poco antes de las 11:00pm, fui dejado en libertad, ¡“GRACIAS A DIOS”! Qué bueno es, Él es mi “PADRE ETERNO Y SIEMPRE PERMANECE FIEL”; ¡Él en ningún momento me dejó, ni me dejará!
Hermano Víctor, hermana Sylvia, gracias a ustedes, a los demás pastores, a los hermanos y amigos de Vino Nuevo, por sus oraciones por mi y mi familia, con que saturaron y bombardearon los cielos y todo el tiempo que estuvieron pendientes, ante tanto amor y cuidado no existen palabras suficientes para agradecer a todos ustedes, solo puedo decir, ¡Gracias, Gracias, Gracias y siempre Gracias! Que Dios les bendiga, multiplique y prospere mas allá de lo que han estado pidiendo y orando o aún, más de lo que puedan imaginar.
Daniel Hinojos |
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Buen día hermanos Víctor y Sylvia; y Congregación de Vino Nuevo. Doy gracias a Dios mi Señor, a Cristo mi Salvador y al Espíritu Santo mi ayudador y fortaleza, por haberme protegido y liberado; después de que un comando de la Policía Federal, en un retén, me privara de la libertad junto con un compañero de trabajo. Bajo el presunto delito o falta, de que el permiso para circular del automóvil de mi amigo era falso, cosa que desconozco ya que nunca nos dieron pruebas o fundamentos basados en hechos reales de que así fuera, el detalle es que, me retuvieron por casi 6 horas en un cuartel de la P.E.P.; y como están las cosas en nuestra amada Cd. Juárez, la verdad yo pensaba lo peor, que quizá nos iban a incriminar por algo mayor, o yo que sé.
La mayor parte del tiempo que pasé ahí, me quitaron mis teléfonos celulares, pero antes de entrar al lugar, pude avisar a mi esposa, ella y mis hijos eran lo que más me preocupaba. Pensaba en lo que estarían sufriendo al no saber nada de mí.
Hace un año sufrimos la terrible desaparición de un hermano de mi esposa, en circunstancias muy sospechosas, ya que los secuestradores nunca pidieron rescate y los testigos comentan que vieron a policías federales al momento de su secuestro. Y me consta el dolor y angustia que pasó la familia entera, especialmente mi esposa. En mi desesperación, sólo le pedía a mi Dios que no se repitiera la historia y que tuviera misericordia de mis hijos y mi esposa. Afortunadamente, Dios ya estaba obrando en poder y favor para con nosotros, ¡Él siempre está en control de todo! “TODO OBRA PARA BIEN...”, dice la Palabra.
Después de la primera hora de haber sido detenido por la policía, ya había una guerra espiritual a mi favor, ya que muchas personas estaban orando y ayudando a mi esposa. Fue un tiempo de interrogatorios tediosos, ya que simplemente querían saber quien era yo a que me dedicaba y por qué había tanta gente interesada en mi paradero. Siempre respondí con honestidad y creo que al ver ellos que era sincero en mis palabras me dejaron en paz. Poco antes de las 11:00pm, fui dejado en libertad, ¡“GRACIAS A DIOS”! Qué bueno es, Él es mi “PADRE ETERNO Y SIEMPRE PERMANECE FIEL”; ¡Él en ningún momento me dejó, ni me dejará!
Hermano Víctor, hermana Sylvia, gracias a ustedes, a los demás pastores, a los hermanos y amigos de Vino Nuevo, por sus oraciones por mi y mi familia, con que saturaron y bombardearon los cielos y todo el tiempo que estuvieron pendientes, ante tanto amor y cuidado no existen palabras suficientes para agradecer a todos ustedes, solo puedo decir, ¡Gracias, Gracias, Gracias y siempre Gracias! Que Dios les bendiga, multiplique y prospere mas allá de lo que han estado pidiendo y orando o aún, más de lo que puedan imaginar.
Daniel Hinojos |
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Buen día hermanos Víctor y Sylvia; y Congregación de Vino Nuevo. Doy gracias a Dios mi Señor, a Cristo mi Salvador y al Espíritu Santo mi ayudador y fortaleza, por haberme protegido y liberado; después de que un comando de la Policía Federal, en un retén, me privara de la libertad junto con un compañero de trabajo. Bajo el presunto delito o falta, de que el permiso para circular del automóvil de mi amigo era falso, cosa que desconozco ya que nunca nos dieron pruebas o fundamentos basados en hechos reales de que así fuera, el detalle es que, me retuvieron por casi 6 horas en un cuartel de la P.E.P.; y como están las cosas en nuestra amada Cd. Juárez, la verdad yo pensaba lo peor, que quizá nos iban a incriminar por algo mayor, o yo que sé.
La mayor parte del tiempo que pasé ahí, me quitaron mis teléfonos celulares, pero antes de entrar al lugar, pude avisar a mi esposa, ella y mis hijos eran lo que más me preocupaba. Pensaba en lo que estarían sufriendo al no saber nada de mí.
Hace un año sufrimos la terrible desaparición de un hermano de mi esposa, en circunstancias muy sospechosas, ya que los secuestradores nunca pidieron rescate y los testigos comentan que vieron a policías federales al momento de su secuestro. Y me consta el dolor y angustia que pasó la familia entera, especialmente mi esposa. En mi desesperación, sólo le pedía a mi Dios que no se repitiera la historia y que tuviera misericordia de mis hijos y mi esposa. Afortunadamente, Dios ya estaba obrando en poder y favor para con nosotros, ¡Él siempre está en control de todo! “TODO OBRA PARA BIEN...”, dice la Palabra.
Después de la primera hora de haber sido detenido por la policía, ya había una guerra espiritual a mi favor, ya que muchas personas estaban orando y ayudando a mi esposa. Fue un tiempo de interrogatorios tediosos, ya que simplemente querían saber quien era yo a que me dedicaba y por qué había tanta gente interesada en mi paradero. Siempre respondí con honestidad y creo que al ver ellos que era sincero en mis palabras me dejaron en paz. Poco antes de las 11:00pm, fui dejado en libertad, ¡“GRACIAS A DIOS”! Qué bueno es, Él es mi “PADRE ETERNO Y SIEMPRE PERMANECE FIEL”; ¡Él en ningún momento me dejó, ni me dejará!
Hermano Víctor, hermana Sylvia, gracias a ustedes, a los demás pastores, a los hermanos y amigos de Vino Nuevo, por sus oraciones por mi y mi familia, con que saturaron y bombardearon los cielos y todo el tiempo que estuvieron pendientes, ante tanto amor y cuidado no existen palabras suficientes para agradecer a todos ustedes, solo puedo decir, ¡Gracias, Gracias, Gracias y siempre Gracias! Que Dios les bendiga, multiplique y prospere mas allá de lo que han estado pidiendo y orando o aún, más de lo que puedan imaginar.
Daniel Hinojos |
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