Testimonios | |||||||
Amado pastor Víctor Richards: Le pido perdón por no haber enviado este testimonio antes. Hoy me siento motivada a escribir lo que yo experimenté unos meses atrás, luego de que ayer escuché el testimonio financiero de lo que Dios hizo en la vida de otra persona. Tiempo atrás, usted nos animaba a leer el libro “Viviendo más Allá de lo Posible” escrito por el hermano Wayne Myers. Por una u otra razón no alcanzaba una copia del libro que ustedes prestan a la congragación, pero después de insistir y perseverar logré conseguir un ejemplar del libro, lo leí y me dispuse a creerle a Dios para mi sostén y mis finanzas. Yo leí el libro en el mes de Julio, para el mes de Agosto tome la decisión de aumentar la cantidad de mi diezmo, de 10% a 20% y también me propuse dar de ofrenda a mi Señor el 9% de mis ingresos. Ese mismo mes mi provisión fue más que suficiente. Me alcanzó y hasta me sobró, algo que no sucede muy a menudo. En el mes de Septiembre fui al notario para agregar a mi testamento la casa que ahora tengo; (uno nunca sabe).Hice la cita y cuando por fin pude ver al notario, este me dijo; “no quiero que usted gaste, nosotros agregamos el inmueble a su testamento sin costo alguno de su parte”. Esto fue una agradable sorpresa para mí, pero el notario continuó diciendo; “su casa es para sus hijos cuando usted muera. Ahora vaya y use el dinero que pensaba gastar en el trámite para que lleve a comer a sus hijos o lo que usted quiera hacer con ese dinero”. Antes de mi cita con el notario me habían informado que el costo del trámite sería de $2,350.00 pesos. Ya se imaginará usted hermano, cómo me sentí, no podía creerlo, así que le pedí que tomara el tiempo necesario para explicarme bien lo que estaba diciendo porque no quería yo tener problemas más adelante. Él me explicó amablemente una vez más y después de un rato yo me fui a casa muy contenta por lo que el Señor había hecho a mi favor. Inmediatamente pensé en la decisión que tomé hacía unas semanas, de aumentar mi diezmo y mi ofrenda al Señor. Esto no es otra cosa que un milagro de provisión de Dios para mi vida y por esto le doy la honra y la gloria a mi Dios. ¡A Él sea toda la gloria! |
|
||||||
Ver Mas |
Testimonios |
Amado pastor Víctor Richards: Le pido perdón por no haber enviado este testimonio antes. Hoy me siento motivada a escribir lo que yo experimenté unos meses atrás, luego de que ayer escuché el testimonio financiero de lo que Dios hizo en la vida de otra persona. Tiempo atrás, usted nos animaba a leer el libro “Viviendo más Allá de lo Posible” escrito por el hermano Wayne Myers. Por una u otra razón no alcanzaba una copia del libro que ustedes prestan a la congragación, pero después de insistir y perseverar logré conseguir un ejemplar del libro, lo leí y me dispuse a creerle a Dios para mi sostén y mis finanzas. Yo leí el libro en el mes de Julio, para el mes de Agosto tome la decisión de aumentar la cantidad de mi diezmo, de 10% a 20% y también me propuse dar de ofrenda a mi Señor el 9% de mis ingresos. Ese mismo mes mi provisión fue más que suficiente. Me alcanzó y hasta me sobró, algo que no sucede muy a menudo. En el mes de Septiembre fui al notario para agregar a mi testamento la casa que ahora tengo; (uno nunca sabe).Hice la cita y cuando por fin pude ver al notario, este me dijo; “no quiero que usted gaste, nosotros agregamos el inmueble a su testamento sin costo alguno de su parte”. Esto fue una agradable sorpresa para mí, pero el notario continuó diciendo; “su casa es para sus hijos cuando usted muera. Ahora vaya y use el dinero que pensaba gastar en el trámite para que lleve a comer a sus hijos o lo que usted quiera hacer con ese dinero”. Antes de mi cita con el notario me habían informado que el costo del trámite sería de $2,350.00 pesos. Ya se imaginará usted hermano, cómo me sentí, no podía creerlo, así que le pedí que tomara el tiempo necesario para explicarme bien lo que estaba diciendo porque no quería yo tener problemas más adelante. Él me explicó amablemente una vez más y después de un rato yo me fui a casa muy contenta por lo que el Señor había hecho a mi favor. Inmediatamente pensé en la decisión que tomé hacía unas semanas, de aumentar mi diezmo y mi ofrenda al Señor. Esto no es otra cosa que un milagro de provisión de Dios para mi vida y por esto le doy la honra y la gloria a mi Dios. ¡A Él sea toda la gloria! |
Ver Mas |
Testimonios |
Amado pastor Víctor Richards: Le pido perdón por no haber enviado este testimonio antes. Hoy me siento motivada a escribir lo que yo experimenté unos meses atrás, luego de que ayer escuché el testimonio financiero de lo que Dios hizo en la vida de otra persona. Tiempo atrás, usted nos animaba a leer el libro “Viviendo más Allá de lo Posible” escrito por el hermano Wayne Myers. Por una u otra razón no alcanzaba una copia del libro que ustedes prestan a la congragación, pero después de insistir y perseverar logré conseguir un ejemplar del libro, lo leí y me dispuse a creerle a Dios para mi sostén y mis finanzas. Yo leí el libro en el mes de Julio, para el mes de Agosto tome la decisión de aumentar la cantidad de mi diezmo, de 10% a 20% y también me propuse dar de ofrenda a mi Señor el 9% de mis ingresos. Ese mismo mes mi provisión fue más que suficiente. Me alcanzó y hasta me sobró, algo que no sucede muy a menudo. En el mes de Septiembre fui al notario para agregar a mi testamento la casa que ahora tengo; (uno nunca sabe).Hice la cita y cuando por fin pude ver al notario, este me dijo; “no quiero que usted gaste, nosotros agregamos el inmueble a su testamento sin costo alguno de su parte”. Esto fue una agradable sorpresa para mí, pero el notario continuó diciendo; “su casa es para sus hijos cuando usted muera. Ahora vaya y use el dinero que pensaba gastar en el trámite para que lleve a comer a sus hijos o lo que usted quiera hacer con ese dinero”. Antes de mi cita con el notario me habían informado que el costo del trámite sería de $2,350.00 pesos. Ya se imaginará usted hermano, cómo me sentí, no podía creerlo, así que le pedí que tomara el tiempo necesario para explicarme bien lo que estaba diciendo porque no quería yo tener problemas más adelante. Él me explicó amablemente una vez más y después de un rato yo me fui a casa muy contenta por lo que el Señor había hecho a mi favor. Inmediatamente pensé en la decisión que tomé hacía unas semanas, de aumentar mi diezmo y mi ofrenda al Señor. Esto no es otra cosa que un milagro de provisión de Dios para mi vida y por esto le doy la honra y la gloria a mi Dios. ¡A Él sea toda la gloria! |
Ver Mas |