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TESTIMONIO DE SANIDAD | |||||||
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Buenos días Pastor Víctor y congregación: Hacemos un agradecimiento público a Dios nuestro Señor en nombre de la señora Felipa Amaro, su familia, en mi nombre y el de mi esposo. También agradecemos al grupo de mujeres de Eternidad y al de jóvenes por sus oraciones y porque en todo tiempo han estado pendientes de la mejoría de mi suegra, la señora Felipa. Agradecemos a Dios por el milagro de vida que hizo en mi suegra. Ella se puso muy enferma, y la internaron de emergencia, pues empezó a dejar de comer, sus niveles de azúcar incrementaron, la presión bajó, dejó de orinar y se descompensó completamente. Al diagnosticarla los médicos decían que tenía un daño irreversible en sus riñones y que por su edad no podían hacer más, pues era muy riesgoso, ya que no podría soportar la diálisis. Los doctores sugirieron a la familia que se la llevaran a casa para que ella pudiera estar en compañía de la familia y en un mejor ambiente, ya que lo misma atención médica que le estaban dando en el hospital se la podrían acondicionar en casa. Todos estábamos desconsolados y tristes por la situación de Fely. De alguna forma tratábamos de asimilar y de aceptar lo que estaba pasando y el desenlace que podía llegar. Pero gracias a las oraciones y a la intercesión por la que estuvimos rodeados como familia, sentimos paz y esperanza, en unos más que en otros. Llevamos a Fely de regreso a casa, la condición de ella era muy decadente, no hablaba, no podía moverse y sus signos vitales poco a poco se estaban apagando. Pero el día siguiente, fue sorprendente ver el,¡¡¡MILAGRO QUE DIOS HABÍA HECHO EN LA VIDA DE FELY!!! Pues ella despertó como si nunca hubiera estado enferma, reconoció a todos, empezó a alimentarse; sus niveles se estabilizaron, se incorporó en la cama y empezó a recibir a su familia con una sonrisa en su rostro. ¡SORPRENDENTE! Esto sí que fue impresionante, ver cómo Dios se glorificaba en la vida de Fely. En los siguientes días la siguieron atendiendo los doctores a consulta domiciliaria, y ellos seguían en lo dicho que Fely tenía un daño irreversible y que esto solo era una mejoría transitoria. Increíble que los médicos seguían deciendo que no, pero Dios nuestro Señor,¡DICE SÍ! Hoy por hoy, a Fely ya le retiraron la sonda para orinar, pues los riñones están nuevamente trabajando, ella, aunque tiene que utilizar la silla de ruedas para desplazarse, ya puede levantarse y sentarse en la silla por sí misma. Ella hoy puede hacer nuevamente sus actividades. GRACIAS SEÑOR JESUS , PORQUE SOLO TU HACES ESTAS OBRAS Y MILAGROS. ¡A TI SEA TODA LA HONRA Y LA GLORIA! |
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TESTIMONIO DE SANIDAD |
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Buenos días Pastor Víctor y congregación: Hacemos un agradecimiento público a Dios nuestro Señor en nombre de la señora Felipa Amaro, su familia, en mi nombre y el de mi esposo. También agradecemos al grupo de mujeres de Eternidad y al de jóvenes por sus oraciones y porque en todo tiempo han estado pendientes de la mejoría de mi suegra, la señora Felipa. Agradecemos a Dios por el milagro de vida que hizo en mi suegra. Ella se puso muy enferma, y la internaron de emergencia, pues empezó a dejar de comer, sus niveles de azúcar incrementaron, la presión bajó, dejó de orinar y se descompensó completamente. Al diagnosticarla los médicos decían que tenía un daño irreversible en sus riñones y que por su edad no podían hacer más, pues era muy riesgoso, ya que no podría soportar la diálisis. Los doctores sugirieron a la familia que se la llevaran a casa para que ella pudiera estar en compañía de la familia y en un mejor ambiente, ya que lo misma atención médica que le estaban dando en el hospital se la podrían acondicionar en casa. Todos estábamos desconsolados y tristes por la situación de Fely. De alguna forma tratábamos de asimilar y de aceptar lo que estaba pasando y el desenlace que podía llegar. Pero gracias a las oraciones y a la intercesión por la que estuvimos rodeados como familia, sentimos paz y esperanza, en unos más que en otros. Llevamos a Fely de regreso a casa, la condición de ella era muy decadente, no hablaba, no podía moverse y sus signos vitales poco a poco se estaban apagando. Pero el día siguiente, fue sorprendente ver el,¡¡¡MILAGRO QUE DIOS HABÍA HECHO EN LA VIDA DE FELY!!! Pues ella despertó como si nunca hubiera estado enferma, reconoció a todos, empezó a alimentarse; sus niveles se estabilizaron, se incorporó en la cama y empezó a recibir a su familia con una sonrisa en su rostro. ¡SORPRENDENTE! Esto sí que fue impresionante, ver cómo Dios se glorificaba en la vida de Fely. En los siguientes días la siguieron atendiendo los doctores a consulta domiciliaria, y ellos seguían en lo dicho que Fely tenía un daño irreversible y que esto solo era una mejoría transitoria. Increíble que los médicos seguían deciendo que no, pero Dios nuestro Señor,¡DICE SÍ! Hoy por hoy, a Fely ya le retiraron la sonda para orinar, pues los riñones están nuevamente trabajando, ella, aunque tiene que utilizar la silla de ruedas para desplazarse, ya puede levantarse y sentarse en la silla por sí misma. Ella hoy puede hacer nuevamente sus actividades. GRACIAS SEÑOR JESUS , PORQUE SOLO TU HACES ESTAS OBRAS Y MILAGROS. ¡A TI SEA TODA LA HONRA Y LA GLORIA! |
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Buenos días Pastor Víctor y congregación: Hacemos un agradecimiento público a Dios nuestro Señor en nombre de la señora Felipa Amaro, su familia, en mi nombre y el de mi esposo. También agradecemos al grupo de mujeres de Eternidad y al de jóvenes por sus oraciones y porque en todo tiempo han estado pendientes de la mejoría de mi suegra, la señora Felipa. Agradecemos a Dios por el milagro de vida que hizo en mi suegra. Ella se puso muy enferma, y la internaron de emergencia, pues empezó a dejar de comer, sus niveles de azúcar incrementaron, la presión bajó, dejó de orinar y se descompensó completamente. Al diagnosticarla los médicos decían que tenía un daño irreversible en sus riñones y que por su edad no podían hacer más, pues era muy riesgoso, ya que no podría soportar la diálisis. Los doctores sugirieron a la familia que se la llevaran a casa para que ella pudiera estar en compañía de la familia y en un mejor ambiente, ya que lo misma atención médica que le estaban dando en el hospital se la podrían acondicionar en casa. Todos estábamos desconsolados y tristes por la situación de Fely. De alguna forma tratábamos de asimilar y de aceptar lo que estaba pasando y el desenlace que podía llegar. Pero gracias a las oraciones y a la intercesión por la que estuvimos rodeados como familia, sentimos paz y esperanza, en unos más que en otros. Llevamos a Fely de regreso a casa, la condición de ella era muy decadente, no hablaba, no podía moverse y sus signos vitales poco a poco se estaban apagando. Pero el día siguiente, fue sorprendente ver el,¡¡¡MILAGRO QUE DIOS HABÍA HECHO EN LA VIDA DE FELY!!! Pues ella despertó como si nunca hubiera estado enferma, reconoció a todos, empezó a alimentarse; sus niveles se estabilizaron, se incorporó en la cama y empezó a recibir a su familia con una sonrisa en su rostro. ¡SORPRENDENTE! Esto sí que fue impresionante, ver cómo Dios se glorificaba en la vida de Fely. En los siguientes días la siguieron atendiendo los doctores a consulta domiciliaria, y ellos seguían en lo dicho que Fely tenía un daño irreversible y que esto solo era una mejoría transitoria. Increíble que los médicos seguían deciendo que no, pero Dios nuestro Señor,¡DICE SÍ! Hoy por hoy, a Fely ya le retiraron la sonda para orinar, pues los riñones están nuevamente trabajando, ella, aunque tiene que utilizar la silla de ruedas para desplazarse, ya puede levantarse y sentarse en la silla por sí misma. Ella hoy puede hacer nuevamente sus actividades. GRACIAS SEÑOR JESUS , PORQUE SOLO TU HACES ESTAS OBRAS Y MILAGROS. ¡A TI SEA TODA LA HONRA Y LA GLORIA! |
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