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El Reino de los Cielos Pt.I | |||||||
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¿Qué es el reino de los Cielos? El reino de los cielos es un reino superior al reino del mundo y al reino de oscuridad. El reino de los cielos es superior a todos los reinos que han existido en este planeta. El reino de los cielos es invisible al ojo humano, así como el viento es invisible, así también es el reino de los cielos pero podemos ver su efecto. Lucas 17:20-21 (versión DIOS HABLA HOY) 20. Los fariseos le preguntaron a Jesús cuándo había de llegar el reino de Dios, y él les contestó: —La venida del reino de Dios no es algo que todo el mundo pueda ver. 21. No se va a decir: “Aquí está”, o “Allí está”; porque el reino de Dios ya está entre ustedes. El reino de Dios no se ve con el ojo, el resultado sí se ve. Es superior a todos los reinos, más real que lo que los ojos ven, más duradero porque es eterno. El reino de los cielos es invisible al ojo humano y también es un secreto para la gran mayoría de los seres humanos. Lo podemos llamar el reino invisible o el reino secreto. Desafortunadamente muchos cristianos han reducido la experiencia del nuevo nacimiento a simplemente la experiencia de ser salvo. Y obviamente debemos enfatizar la salvación, pero el perdón no debe verse como la totalidad, sino el principio, de nuestra experiencia en el reino de los cielos. La salvación nos provee acceso al mundo invisible, al reino de Dios, del cual debemos aprender y experimentarlo y compartirlo con otros. Juan 3:3 Respondió Jesús y le dijo: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de nuevo, no puede ver el reino de Dios. Mateo 28:18-20 Y Jesús se acercó y les habló diciendo: Toda potestad me es dada en el cielo y en la tierra. 19. Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; 20. enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Es necesario que enseñemos los principios del reino. Cuando uno recibe a Cristo, uno recibe el perdón de sus pecados, uno encuentra que ya ha sido salvo instantáneamente, su nombre está escrito en el libro de la vida, ¡pero esto es sólo el principio!, tienes que aprender a vivir en el reino. Para eso vamos a ver distintos principios del reino de Dios que nos van ayudar a vivir en el. Y tú te preguntaras: “¿Por qué quiero entrar más profundo en el reino de Dios si ya estoy perdonado?”. Porque sólo entrar, no es suficiente, tenemos que aprender a vivir en este mundo. Aunque nuestra residencia está en este reino visible, nuestra ciudadanía está en el cielo. El reino invisible de Dios puede gobernar al reino visible, Jesús tiene autoridad sobre ambos. Hablando de los que sólo reciben a Cristo, pero siguen viviendo con las normas del reino de oscuridad, mintiendo, engañando, algunos robando, hablando majaderías, viendo pornografía, otros hasta fornicando y en rebelión, estas cosas no se hacen en el nuevo reino, en el cual has entrado. ¿Por qué crees que puedes ser un tramposo, engañador y mentiroso en el reino de Dios? Tal vez dices: “Hno. Victor todos hacen negocio así, todos lo hacen”. No todos, y no debemos hacerlo nosotros. Mi pregunta es: ¿De cuál reino eres tú? Quiero hacer hincapié en esto, verdaderamente hay un mundo invisible del Espíritu de Dios, ¿lo crees? Y es posible recibir ayuda de este reino invisible. Nosotros debemos reconocer que el reino de Dios es la enseñanza central de Jesús. Él empezó su ministerio aquí en la tierra declarando la llegada del reino. El reino de los cielos es algo tan glorioso que Jesús lo comparo con un tesoro y también con una perla preciosa. Mateo 13:44 Además, el reino de los cielos es semejante a un tesoro escondido en un campo, el cual un hombre halla, y lo esconde de nuevo; y gozoso por ello va y vende todo lo que tiene, y compra aquel campo. Mateo 13:45-46 También el reino de los cielos es semejante a un mercader que busca buenas perlas, que habiendo hallado una perla preciosa, fue y vendió todo lo que tenía, y la compró. Mateo 4:17 Desde entonces comenzó Jesús a predicar, y a decir: Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado. “Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado…”, si tú vas a vivir en el reino de los cielos tienes que cambiar, no puedes vivir como viviste en el reino de oscuridad. Dios demanda de ti y de mí que cambiemos, no somos salvos por obras, pero Él demanda de nosotros que aprendamos a vivir en el reino de Dios y si lo hacemos, la calidad de vida que viviremos no se puede describir, ¡no se puede! Jesús terminó su ministerio hablando de las cosas que pertenecen al reino de Dios. Hechos 1:3 a quienes también, después de haber padecido, se presentó vivo con muchas pruebas indubitables, apareciéndoseles durante cuarenta días y hablándoles acerca del reino de Dios. Jesús empezó su ministerio hablando del reino de Dios, terminó su ministerio hablando del reino de Dios. Jesús estableció y enseñó los principios que funcionan en Su reino, puedes llamarlo principios o leyes del reino, vamos a descubrirlos y estudiarlos. Vivimos en tiempo de inseguridad, las cosas que están sucediendo nos provocan ansiedad, oímos de terrorismo, en tiempos de colapso económico, la economía del mundo está afectada. La gente está gritando que sus gobernantes arreglen esta situación, la inmoralidad sexual está por los cielos. La Biblia es muy clara. 1 Corintios 6:9 ¿No sabéis que los injustos no heredarán el reino de Dios? No erréis; ni los fornicarios, ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los afeminados, ni los que se echan con varones. No podemos ignorar lo que Dios dice en Su Palabra y no podemos quitar lo que nos incomoda. Si eres un seguidor de Jesús, ahora perteneces al reino de Dios y en el reino de Dios no hay pecado. Hay rebelión contra Dios, la gente sabe lo que dice la Biblia, pero no viven conforme a la Palabra de Dios, viven en rebelión. En un tiempo como el que acabo de describir, que todos sabemos que se refiere a este mundo en que vivimos, con más razón necesitamos vivir en el reino de los cielos, el reino de Dios. Es menester que sepamos vivir en ese reino. Para entender el reino de los cielos y cómo funciona y cómo reina en el mundo visible, tenemos que entender primeramente que el reino de Dios es un reino de absoluta abundancia y en segundo lugar, es posible tener absoluto favor con el Rey de esta abundancia. Jesús dijo a sus discípulos que ellos tuvieron la dicha de entender las cosas del reino. Mateo 13:11 Él respondiendo, les dijo: Porque a vosotros os es dado saber los misterios del reino de los cielos; mas a ellos no les es dado. “Ellos”, ¿Quiénes son ellos? Los incrédulos. Después de decirles, que a ellos les fue dado saber los misterios del reino de los cielos, les explicó la parábola del sembrador. Les dijo lo que significa cada circunstancia donde cayó la semilla y al final, la semilla que cae en buena tierra es la que da fruto en el reino de Dios. La “buena tierra” somos tu y yo, quienes hemos entregado nuestras vidas a Jesús. Leemos esto en Mateo 13:8 Pero parte cayó en buena tierra, y dio fruto, cuál a ciento, cuál a sesenta, y cuál a treinta por uno. El porcentaje que el Señor dice que podemos recibir es 100%. Siembras una semilla y recibes dos semillas. ¿Me estoy explicando?, absoluta abundancia, ¡qué tremendo reino! También es un reino de total posibilidad, Jesús lo mostró. Mateo 14:13-21 Oyéndolo Jesús, se apartó de allí en una barca a un lugar desierto y apartado; y cuando la gente lo oyó, le siguió a pie desde las ciudades. 14. Y saliendo Jesús, vio una gran multitud, y tuvo compasión de ellos, y sanó a los que de ellos estaban enfermos. 15. Cuando anochecía, se acercaron a él sus discípulos, diciendo: El lugar es desierto, y la hora ya pasada; despide a la multitud, para que vayan por las aldeas y compren de comer. 16. Jesús les dijo: No tienen necesidad de irse; dadles vosotros de comer. 17. Y ellos dijeron: No tenemos aquí sino cinco panes y dos peces. 18. Él les dijo: Traédmelos acá. 19. Entonces mandó a la gente recostarse sobre la hierba; y tomando los cinco panes y los dos peces, y levantando los ojos al cielo, bendijo, y partió y dio los panes a los discípulos, y los discípulos a la multitud. 20. Y comieron todos, y se saciaron; y recogieron lo que sobró de los pedazos, doce cestas llenas. 21. Y los que comieron fueron como cinco mil hombres, sin contar las mujeres y los niños. ¿Cuánto fue? Unos panes, ¿cuántos panes? ¿Cuántos peces? 5 panes y 2 peces, ¿qué hizo con eso? ¡Alimentó a cinco mil! Las circunstancias no limitan a Dios, tampoco está limitado por las leyes naturales que Él estableció. Él puede hacer lo que quiere hacer, Él es Dios. Él, de la nada puede crear algo, Él dijo sea la luz y fue la luz. Su mundo es un mundo total, salud total, vida total, energía total, fuerza total y provisión total. Tú dices: ¿Cómo puedes decir eso Hno. Victor, a poco no tienes enfermedad? Sí, Pero no me voy a quedar con la enfermedad, nuestra vida está dentro del reino de los cielos, así que voy a ser sano. Sabes que, cuando leemos las bendiciones en la Biblia estamos nosotros viendo como debe ser el reino de Dios. Números 6:24-26 Jehová te bendiga, y te guarde; 25. Jehová haga resplandecer su rostro sobre ti, y tenga de ti misericordia; 26. Jehová alce sobre ti su rostro, y ponga en ti paz. Cuando Dios nos bendice y nos guarda, cuando resplandece su rostro sobre nosotros, entonces Él puede causar que nuestros planes tengan éxito, Él hace que la gente nos quiera, Él hace que seamos escogidos sobre otros de igual o mejor talento, Él puede proteger a nuestros hijos, guardar nuestra propiedad y hacer que los ángeles nos ayuden… este es el reino de los cielos. ¿Dónde está tu ciudadanía? ¿En cuál reino? |
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Por: Hno. Victor Richards
El Reino de los Cielos Pt.I |
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¿Qué es el reino de los Cielos? El reino de los cielos es un reino superior al reino del mundo y al reino de oscuridad. El reino de los cielos es superior a todos los reinos que han existido en este planeta. El reino de los cielos es invisible al ojo humano, así como el viento es invisible, así también es el reino de los cielos pero podemos ver su efecto. Lucas 17:20-21 (versión DIOS HABLA HOY) 20. Los fariseos le preguntaron a Jesús cuándo había de llegar el reino de Dios, y él les contestó: —La venida del reino de Dios no es algo que todo el mundo pueda ver. 21. No se va a decir: “Aquí está”, o “Allí está”; porque el reino de Dios ya está entre ustedes. El reino de Dios no se ve con el ojo, el resultado sí se ve. Es superior a todos los reinos, más real que lo que los ojos ven, más duradero porque es eterno. El reino de los cielos es invisible al ojo humano y también es un secreto para la gran mayoría de los seres humanos. Lo podemos llamar el reino invisible o el reino secreto. Desafortunadamente muchos cristianos han reducido la experiencia del nuevo nacimiento a simplemente la experiencia de ser salvo. Y obviamente debemos enfatizar la salvación, pero el perdón no debe verse como la totalidad, sino el principio, de nuestra experiencia en el reino de los cielos. La salvación nos provee acceso al mundo invisible, al reino de Dios, del cual debemos aprender y experimentarlo y compartirlo con otros. Juan 3:3 Respondió Jesús y le dijo: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de nuevo, no puede ver el reino de Dios. Mateo 28:18-20 Y Jesús se acercó y les habló diciendo: Toda potestad me es dada en el cielo y en la tierra. 19. Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; 20. enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Es necesario que enseñemos los principios del reino. Cuando uno recibe a Cristo, uno recibe el perdón de sus pecados, uno encuentra que ya ha sido salvo instantáneamente, su nombre está escrito en el libro de la vida, ¡pero esto es sólo el principio!, tienes que aprender a vivir en el reino. Para eso vamos a ver distintos principios del reino de Dios que nos van ayudar a vivir en el. Y tú te preguntaras: “¿Por qué quiero entrar más profundo en el reino de Dios si ya estoy perdonado?”. Porque sólo entrar, no es suficiente, tenemos que aprender a vivir en este mundo. Aunque nuestra residencia está en este reino visible, nuestra ciudadanía está en el cielo. El reino invisible de Dios puede gobernar al reino visible, Jesús tiene autoridad sobre ambos. Hablando de los que sólo reciben a Cristo, pero siguen viviendo con las normas del reino de oscuridad, mintiendo, engañando, algunos robando, hablando majaderías, viendo pornografía, otros hasta fornicando y en rebelión, estas cosas no se hacen en el nuevo reino, en el cual has entrado. ¿Por qué crees que puedes ser un tramposo, engañador y mentiroso en el reino de Dios? Tal vez dices: “Hno. Victor todos hacen negocio así, todos lo hacen”. No todos, y no debemos hacerlo nosotros. Mi pregunta es: ¿De cuál reino eres tú? Quiero hacer hincapié en esto, verdaderamente hay un mundo invisible del Espíritu de Dios, ¿lo crees? Y es posible recibir ayuda de este reino invisible. Nosotros debemos reconocer que el reino de Dios es la enseñanza central de Jesús. Él empezó su ministerio aquí en la tierra declarando la llegada del reino. El reino de los cielos es algo tan glorioso que Jesús lo comparo con un tesoro y también con una perla preciosa. Mateo 13:44 Además, el reino de los cielos es semejante a un tesoro escondido en un campo, el cual un hombre halla, y lo esconde de nuevo; y gozoso por ello va y vende todo lo que tiene, y compra aquel campo. Mateo 13:45-46 También el reino de los cielos es semejante a un mercader que busca buenas perlas, que habiendo hallado una perla preciosa, fue y vendió todo lo que tenía, y la compró. Mateo 4:17 Desde entonces comenzó Jesús a predicar, y a decir: Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado. “Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado…”, si tú vas a vivir en el reino de los cielos tienes que cambiar, no puedes vivir como viviste en el reino de oscuridad. Dios demanda de ti y de mí que cambiemos, no somos salvos por obras, pero Él demanda de nosotros que aprendamos a vivir en el reino de Dios y si lo hacemos, la calidad de vida que viviremos no se puede describir, ¡no se puede! Jesús terminó su ministerio hablando de las cosas que pertenecen al reino de Dios. Hechos 1:3 a quienes también, después de haber padecido, se presentó vivo con muchas pruebas indubitables, apareciéndoseles durante cuarenta días y hablándoles acerca del reino de Dios. Jesús empezó su ministerio hablando del reino de Dios, terminó su ministerio hablando del reino de Dios. Jesús estableció y enseñó los principios que funcionan en Su reino, puedes llamarlo principios o leyes del reino, vamos a descubrirlos y estudiarlos. Vivimos en tiempo de inseguridad, las cosas que están sucediendo nos provocan ansiedad, oímos de terrorismo, en tiempos de colapso económico, la economía del mundo está afectada. La gente está gritando que sus gobernantes arreglen esta situación, la inmoralidad sexual está por los cielos. La Biblia es muy clara. 1 Corintios 6:9 ¿No sabéis que los injustos no heredarán el reino de Dios? No erréis; ni los fornicarios, ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los afeminados, ni los que se echan con varones. No podemos ignorar lo que Dios dice en Su Palabra y no podemos quitar lo que nos incomoda. Si eres un seguidor de Jesús, ahora perteneces al reino de Dios y en el reino de Dios no hay pecado. Hay rebelión contra Dios, la gente sabe lo que dice la Biblia, pero no viven conforme a la Palabra de Dios, viven en rebelión. En un tiempo como el que acabo de describir, que todos sabemos que se refiere a este mundo en que vivimos, con más razón necesitamos vivir en el reino de los cielos, el reino de Dios. Es menester que sepamos vivir en ese reino. Para entender el reino de los cielos y cómo funciona y cómo reina en el mundo visible, tenemos que entender primeramente que el reino de Dios es un reino de absoluta abundancia y en segundo lugar, es posible tener absoluto favor con el Rey de esta abundancia. Jesús dijo a sus discípulos que ellos tuvieron la dicha de entender las cosas del reino. Mateo 13:11 Él respondiendo, les dijo: Porque a vosotros os es dado saber los misterios del reino de los cielos; mas a ellos no les es dado. “Ellos”, ¿Quiénes son ellos? Los incrédulos. Después de decirles, que a ellos les fue dado saber los misterios del reino de los cielos, les explicó la parábola del sembrador. Les dijo lo que significa cada circunstancia donde cayó la semilla y al final, la semilla que cae en buena tierra es la que da fruto en el reino de Dios. La “buena tierra” somos tu y yo, quienes hemos entregado nuestras vidas a Jesús. Leemos esto en Mateo 13:8 Pero parte cayó en buena tierra, y dio fruto, cuál a ciento, cuál a sesenta, y cuál a treinta por uno. El porcentaje que el Señor dice que podemos recibir es 100%. Siembras una semilla y recibes dos semillas. ¿Me estoy explicando?, absoluta abundancia, ¡qué tremendo reino! También es un reino de total posibilidad, Jesús lo mostró. Mateo 14:13-21 Oyéndolo Jesús, se apartó de allí en una barca a un lugar desierto y apartado; y cuando la gente lo oyó, le siguió a pie desde las ciudades. 14. Y saliendo Jesús, vio una gran multitud, y tuvo compasión de ellos, y sanó a los que de ellos estaban enfermos. 15. Cuando anochecía, se acercaron a él sus discípulos, diciendo: El lugar es desierto, y la hora ya pasada; despide a la multitud, para que vayan por las aldeas y compren de comer. 16. Jesús les dijo: No tienen necesidad de irse; dadles vosotros de comer. 17. Y ellos dijeron: No tenemos aquí sino cinco panes y dos peces. 18. Él les dijo: Traédmelos acá. 19. Entonces mandó a la gente recostarse sobre la hierba; y tomando los cinco panes y los dos peces, y levantando los ojos al cielo, bendijo, y partió y dio los panes a los discípulos, y los discípulos a la multitud. 20. Y comieron todos, y se saciaron; y recogieron lo que sobró de los pedazos, doce cestas llenas. 21. Y los que comieron fueron como cinco mil hombres, sin contar las mujeres y los niños. ¿Cuánto fue? Unos panes, ¿cuántos panes? ¿Cuántos peces? 5 panes y 2 peces, ¿qué hizo con eso? ¡Alimentó a cinco mil! Las circunstancias no limitan a Dios, tampoco está limitado por las leyes naturales que Él estableció. Él puede hacer lo que quiere hacer, Él es Dios. Él, de la nada puede crear algo, Él dijo sea la luz y fue la luz. Su mundo es un mundo total, salud total, vida total, energía total, fuerza total y provisión total. Tú dices: ¿Cómo puedes decir eso Hno. Victor, a poco no tienes enfermedad? Sí, Pero no me voy a quedar con la enfermedad, nuestra vida está dentro del reino de los cielos, así que voy a ser sano. Sabes que, cuando leemos las bendiciones en la Biblia estamos nosotros viendo como debe ser el reino de Dios. Números 6:24-26 Jehová te bendiga, y te guarde; 25. Jehová haga resplandecer su rostro sobre ti, y tenga de ti misericordia; 26. Jehová alce sobre ti su rostro, y ponga en ti paz. Cuando Dios nos bendice y nos guarda, cuando resplandece su rostro sobre nosotros, entonces Él puede causar que nuestros planes tengan éxito, Él hace que la gente nos quiera, Él hace que seamos escogidos sobre otros de igual o mejor talento, Él puede proteger a nuestros hijos, guardar nuestra propiedad y hacer que los ángeles nos ayuden… este es el reino de los cielos. ¿Dónde está tu ciudadanía? ¿En cuál reino? |
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El Reino de los Cielos Pt.I |
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¿Qué es el reino de los Cielos? El reino de los cielos es un reino superior al reino del mundo y al reino de oscuridad. El reino de los cielos es superior a todos los reinos que han existido en este planeta. El reino de los cielos es invisible al ojo humano, así como el viento es invisible, así también es el reino de los cielos pero podemos ver su efecto. Lucas 17:20-21 (versión DIOS HABLA HOY) 20. Los fariseos le preguntaron a Jesús cuándo había de llegar el reino de Dios, y él les contestó: —La venida del reino de Dios no es algo que todo el mundo pueda ver. 21. No se va a decir: “Aquí está”, o “Allí está”; porque el reino de Dios ya está entre ustedes. El reino de Dios no se ve con el ojo, el resultado sí se ve. Es superior a todos los reinos, más real que lo que los ojos ven, más duradero porque es eterno. El reino de los cielos es invisible al ojo humano y también es un secreto para la gran mayoría de los seres humanos. Lo podemos llamar el reino invisible o el reino secreto. Desafortunadamente muchos cristianos han reducido la experiencia del nuevo nacimiento a simplemente la experiencia de ser salvo. Y obviamente debemos enfatizar la salvación, pero el perdón no debe verse como la totalidad, sino el principio, de nuestra experiencia en el reino de los cielos. La salvación nos provee acceso al mundo invisible, al reino de Dios, del cual debemos aprender y experimentarlo y compartirlo con otros. Juan 3:3 Respondió Jesús y le dijo: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de nuevo, no puede ver el reino de Dios. Mateo 28:18-20 Y Jesús se acercó y les habló diciendo: Toda potestad me es dada en el cielo y en la tierra. 19. Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; 20. enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Es necesario que enseñemos los principios del reino. Cuando uno recibe a Cristo, uno recibe el perdón de sus pecados, uno encuentra que ya ha sido salvo instantáneamente, su nombre está escrito en el libro de la vida, ¡pero esto es sólo el principio!, tienes que aprender a vivir en el reino. Para eso vamos a ver distintos principios del reino de Dios que nos van ayudar a vivir en el. Y tú te preguntaras: “¿Por qué quiero entrar más profundo en el reino de Dios si ya estoy perdonado?”. Porque sólo entrar, no es suficiente, tenemos que aprender a vivir en este mundo. Aunque nuestra residencia está en este reino visible, nuestra ciudadanía está en el cielo. El reino invisible de Dios puede gobernar al reino visible, Jesús tiene autoridad sobre ambos. Hablando de los que sólo reciben a Cristo, pero siguen viviendo con las normas del reino de oscuridad, mintiendo, engañando, algunos robando, hablando majaderías, viendo pornografía, otros hasta fornicando y en rebelión, estas cosas no se hacen en el nuevo reino, en el cual has entrado. ¿Por qué crees que puedes ser un tramposo, engañador y mentiroso en el reino de Dios? Tal vez dices: “Hno. Victor todos hacen negocio así, todos lo hacen”. No todos, y no debemos hacerlo nosotros. Mi pregunta es: ¿De cuál reino eres tú? Quiero hacer hincapié en esto, verdaderamente hay un mundo invisible del Espíritu de Dios, ¿lo crees? Y es posible recibir ayuda de este reino invisible. Nosotros debemos reconocer que el reino de Dios es la enseñanza central de Jesús. Él empezó su ministerio aquí en la tierra declarando la llegada del reino. El reino de los cielos es algo tan glorioso que Jesús lo comparo con un tesoro y también con una perla preciosa. Mateo 13:44 Además, el reino de los cielos es semejante a un tesoro escondido en un campo, el cual un hombre halla, y lo esconde de nuevo; y gozoso por ello va y vende todo lo que tiene, y compra aquel campo. Mateo 13:45-46 También el reino de los cielos es semejante a un mercader que busca buenas perlas, que habiendo hallado una perla preciosa, fue y vendió todo lo que tenía, y la compró. Mateo 4:17 Desde entonces comenzó Jesús a predicar, y a decir: Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado. “Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado…”, si tú vas a vivir en el reino de los cielos tienes que cambiar, no puedes vivir como viviste en el reino de oscuridad. Dios demanda de ti y de mí que cambiemos, no somos salvos por obras, pero Él demanda de nosotros que aprendamos a vivir en el reino de Dios y si lo hacemos, la calidad de vida que viviremos no se puede describir, ¡no se puede! Jesús terminó su ministerio hablando de las cosas que pertenecen al reino de Dios. Hechos 1:3 a quienes también, después de haber padecido, se presentó vivo con muchas pruebas indubitables, apareciéndoseles durante cuarenta días y hablándoles acerca del reino de Dios. Jesús empezó su ministerio hablando del reino de Dios, terminó su ministerio hablando del reino de Dios. Jesús estableció y enseñó los principios que funcionan en Su reino, puedes llamarlo principios o leyes del reino, vamos a descubrirlos y estudiarlos. Vivimos en tiempo de inseguridad, las cosas que están sucediendo nos provocan ansiedad, oímos de terrorismo, en tiempos de colapso económico, la economía del mundo está afectada. La gente está gritando que sus gobernantes arreglen esta situación, la inmoralidad sexual está por los cielos. La Biblia es muy clara. 1 Corintios 6:9 ¿No sabéis que los injustos no heredarán el reino de Dios? No erréis; ni los fornicarios, ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los afeminados, ni los que se echan con varones. No podemos ignorar lo que Dios dice en Su Palabra y no podemos quitar lo que nos incomoda. Si eres un seguidor de Jesús, ahora perteneces al reino de Dios y en el reino de Dios no hay pecado. Hay rebelión contra Dios, la gente sabe lo que dice la Biblia, pero no viven conforme a la Palabra de Dios, viven en rebelión. En un tiempo como el que acabo de describir, que todos sabemos que se refiere a este mundo en que vivimos, con más razón necesitamos vivir en el reino de los cielos, el reino de Dios. Es menester que sepamos vivir en ese reino. Para entender el reino de los cielos y cómo funciona y cómo reina en el mundo visible, tenemos que entender primeramente que el reino de Dios es un reino de absoluta abundancia y en segundo lugar, es posible tener absoluto favor con el Rey de esta abundancia. Jesús dijo a sus discípulos que ellos tuvieron la dicha de entender las cosas del reino. Mateo 13:11 Él respondiendo, les dijo: Porque a vosotros os es dado saber los misterios del reino de los cielos; mas a ellos no les es dado. “Ellos”, ¿Quiénes son ellos? Los incrédulos. Después de decirles, que a ellos les fue dado saber los misterios del reino de los cielos, les explicó la parábola del sembrador. Les dijo lo que significa cada circunstancia donde cayó la semilla y al final, la semilla que cae en buena tierra es la que da fruto en el reino de Dios. La “buena tierra” somos tu y yo, quienes hemos entregado nuestras vidas a Jesús. Leemos esto en Mateo 13:8 Pero parte cayó en buena tierra, y dio fruto, cuál a ciento, cuál a sesenta, y cuál a treinta por uno. El porcentaje que el Señor dice que podemos recibir es 100%. Siembras una semilla y recibes dos semillas. ¿Me estoy explicando?, absoluta abundancia, ¡qué tremendo reino! También es un reino de total posibilidad, Jesús lo mostró. Mateo 14:13-21 Oyéndolo Jesús, se apartó de allí en una barca a un lugar desierto y apartado; y cuando la gente lo oyó, le siguió a pie desde las ciudades. 14. Y saliendo Jesús, vio una gran multitud, y tuvo compasión de ellos, y sanó a los que de ellos estaban enfermos. 15. Cuando anochecía, se acercaron a él sus discípulos, diciendo: El lugar es desierto, y la hora ya pasada; despide a la multitud, para que vayan por las aldeas y compren de comer. 16. Jesús les dijo: No tienen necesidad de irse; dadles vosotros de comer. 17. Y ellos dijeron: No tenemos aquí sino cinco panes y dos peces. 18. Él les dijo: Traédmelos acá. 19. Entonces mandó a la gente recostarse sobre la hierba; y tomando los cinco panes y los dos peces, y levantando los ojos al cielo, bendijo, y partió y dio los panes a los discípulos, y los discípulos a la multitud. 20. Y comieron todos, y se saciaron; y recogieron lo que sobró de los pedazos, doce cestas llenas. 21. Y los que comieron fueron como cinco mil hombres, sin contar las mujeres y los niños. ¿Cuánto fue? Unos panes, ¿cuántos panes? ¿Cuántos peces? 5 panes y 2 peces, ¿qué hizo con eso? ¡Alimentó a cinco mil! Las circunstancias no limitan a Dios, tampoco está limitado por las leyes naturales que Él estableció. Él puede hacer lo que quiere hacer, Él es Dios. Él, de la nada puede crear algo, Él dijo sea la luz y fue la luz. Su mundo es un mundo total, salud total, vida total, energía total, fuerza total y provisión total. Tú dices: ¿Cómo puedes decir eso Hno. Victor, a poco no tienes enfermedad? Sí, Pero no me voy a quedar con la enfermedad, nuestra vida está dentro del reino de los cielos, así que voy a ser sano. Sabes que, cuando leemos las bendiciones en la Biblia estamos nosotros viendo como debe ser el reino de Dios. Números 6:24-26 Jehová te bendiga, y te guarde; 25. Jehová haga resplandecer su rostro sobre ti, y tenga de ti misericordia; 26. Jehová alce sobre ti su rostro, y ponga en ti paz. Cuando Dios nos bendice y nos guarda, cuando resplandece su rostro sobre nosotros, entonces Él puede causar que nuestros planes tengan éxito, Él hace que la gente nos quiera, Él hace que seamos escogidos sobre otros de igual o mejor talento, Él puede proteger a nuestros hijos, guardar nuestra propiedad y hacer que los ángeles nos ayuden… este es el reino de los cielos. ¿Dónde está tu ciudadanía? ¿En cuál reino? |
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