En Busca de la Fe Vanguardista #5 | |||||||
FE POR OÍRLa gloria postrera será mayor que la primera, es lo que dice Dios en Su Palabra y pedimos que esta Palabra se cumpla aquí, en nuestras vidas y en la iglesia mexicana. En el nombre de Jesús, amén. Continuamos nuestra serie: En busca de la Fe vanguardista. En nuestro estudio hemos visto que hay una medida de fe impartida, un don de fe; fe que crece como un grano de mostaza, poca fe, hay fe que mueve montañas y más; mucho mas.Voy a leer una parte de un testimonio que me enviaron unos hermanos de San Luis Potosí, dice: “Queremos compartirle un testimonio que sucedió el domingo. Acá todas las casas tienen una cisterna de agua. Un niño como de 4 años cayó dentro de la cisterna, estuvo como siete minutos adentro, hasta que el pastor se dio cuenta y lo sacó. La iglesia comenzó a clamar por un milagro de Dios, porque el niño había muerto, Dios respondió y el niño resucitó a los pocos minutos. Los médicos no pueden creer lo que sucedió ya que el niño no tiene ninguna secuela, está en perfecto estado”. ¡Gloria a Dios! La televisora local va hacer un documental de los hechos, ya que ellos comentaron que siempre se dan malas noticias en televisión y ellos quieren que todos sepan que sí ocurren milagros. En Hebreos 11:1 leemos: Es, pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve. Certeza y convicción. La fe es la certeza de lo que se espera; cuando alguien está esperando algo que no ha sucedido, pero tiene la certeza de verlo suceder, esto es fe. También, la convicción de lo que no se ve… todavía. La Biblia en Romanos 10:17 dice: Así que la fe es por el oír, y el oír, por la palabra de Dios. En español, los que tradujeron la Biblia pusieron “es”, en griego realmente dice: “Así que la fe por el oír”. Es por el oír, viene por el oír, existe por el oír. Fe por oír, oír la Palabra de Dios, la Palabra escrita, léela, conócela; si quieres que tu fe crezca, entonces necesitas conocer la Biblia. Les he dicho que lean Mateo, Marcos, Lucas, Juan, Hechos y luego que repitan, y lo repitan, porque yo sé lo que puede hacer con tu fe. Usted dice; pero no tengo mucho tiempo. ¿Tienes 5 minutos en la mañana? O, ¿en la noche? Entonces empieza a hacerlo; después te vas a encontrar enamorado de la Palabra y el nivel de tu fe va a ir hacia arriba. El texto bíblico dice; “así que la fe es por el oír, y el oír, por la palabra de Dios”. Hay que aprender a reconocer Su voz, la Palabra hablada por Dios, aprende a distinguir si la voz viene a tu mente o a tu espíritu. Si viene a tu mente; entonces, puede ser solo un pensamiento, pero cuando aprendes a reconocer la voz de Dios en tu espíritu, entonces tú sabes Quién está hablando. Hablando de la Palabra de Dios hablada; Dios me habló allá en la Sierra; voy a sacarte de este lugar y ponerte en un lugar ancho y hacerte llevar fruto y fruto que permanece. Lo oí, en mi oído, la voz estaba en el aire, ¡lo oí! Luego semanas más tarde, me habló y dijo; este es el lugar a donde ir, Él nos trajo a esta frontera; esta vez entró por mi espíritu, no por percepción auditiva y sobre esta Palabra de Dios hablada, vendimos nuestra casa en La Junta, vendimos todos nuestros muebles, nos mudamos a esta frontera norte y aquí vendimos la camioneta de doble tracción sabiendo que ya no era necesaria. Aún no sabíamos qué, o cómo, o cuándo, pero porque Él había hablado y por Su gracia, entramos en la aventura de la vida de fe, una vez más. Vender tu casa, tus muebles, mudarte de donde has vivido por tantos años, luego vender el vehículo, con una convicción y certeza sobre la Palabra de Dios hablada. Pero, recuerden, requirió una Palabra de Dios, de lo contrario hubiera sido un paso de altísimo riesgo, con un por ciento o menos de probabilidad, que sucediera algo bueno. Pero Dios había hablado; así que la fe es por el oír, viene por el oír, existe por el oír y el oír por la Palabra de Dios. Busca, lee y escucha las Escrituras que es la Palabra hablada de Dios, para que tu fe, ¡nuestra fe!, crezca. Solo así podremos ver milagros otra vez. VAMOS A ORAR Padre celestial queremos que se haga Tu voluntad aquí en la tierra, así como se cumple en el cielo. Haz Tu voluntad en nuestras vidas, como se hace en el cielo. Queremos crecer en nuestra fe. Queremos aprender a oír Tu voz. A escuchar Tu Palabra hablada que nos haga avanzar en la fe, para ver Tus grandes obras suceder en nuestras vidas. Padre, ven sobre las congregaciones en México y que Tu Espíritu Santo nos provoque a celo por TU Palabra, por Tu presencia y por las cosas de Tu reino. En el nombre de Jesús, amén. |
|
||||||
Ver Mas |
En Busca de la Fe Vanguardista #5 |
FE POR OÍRLa gloria postrera será mayor que la primera, es lo que dice Dios en Su Palabra y pedimos que esta Palabra se cumpla aquí, en nuestras vidas y en la iglesia mexicana. En el nombre de Jesús, amén. Continuamos nuestra serie: En busca de la Fe vanguardista. En nuestro estudio hemos visto que hay una medida de fe impartida, un don de fe; fe que crece como un grano de mostaza, poca fe, hay fe que mueve montañas y más; mucho mas.Voy a leer una parte de un testimonio que me enviaron unos hermanos de San Luis Potosí, dice: “Queremos compartirle un testimonio que sucedió el domingo. Acá todas las casas tienen una cisterna de agua. Un niño como de 4 años cayó dentro de la cisterna, estuvo como siete minutos adentro, hasta que el pastor se dio cuenta y lo sacó. La iglesia comenzó a clamar por un milagro de Dios, porque el niño había muerto, Dios respondió y el niño resucitó a los pocos minutos. Los médicos no pueden creer lo que sucedió ya que el niño no tiene ninguna secuela, está en perfecto estado”. ¡Gloria a Dios! La televisora local va hacer un documental de los hechos, ya que ellos comentaron que siempre se dan malas noticias en televisión y ellos quieren que todos sepan que sí ocurren milagros. En Hebreos 11:1 leemos: Es, pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve. Certeza y convicción. La fe es la certeza de lo que se espera; cuando alguien está esperando algo que no ha sucedido, pero tiene la certeza de verlo suceder, esto es fe. También, la convicción de lo que no se ve… todavía. La Biblia en Romanos 10:17 dice: Así que la fe es por el oír, y el oír, por la palabra de Dios. En español, los que tradujeron la Biblia pusieron “es”, en griego realmente dice: “Así que la fe por el oír”. Es por el oír, viene por el oír, existe por el oír. Fe por oír, oír la Palabra de Dios, la Palabra escrita, léela, conócela; si quieres que tu fe crezca, entonces necesitas conocer la Biblia. Les he dicho que lean Mateo, Marcos, Lucas, Juan, Hechos y luego que repitan, y lo repitan, porque yo sé lo que puede hacer con tu fe. Usted dice; pero no tengo mucho tiempo. ¿Tienes 5 minutos en la mañana? O, ¿en la noche? Entonces empieza a hacerlo; después te vas a encontrar enamorado de la Palabra y el nivel de tu fe va a ir hacia arriba. El texto bíblico dice; “así que la fe es por el oír, y el oír, por la palabra de Dios”. Hay que aprender a reconocer Su voz, la Palabra hablada por Dios, aprende a distinguir si la voz viene a tu mente o a tu espíritu. Si viene a tu mente; entonces, puede ser solo un pensamiento, pero cuando aprendes a reconocer la voz de Dios en tu espíritu, entonces tú sabes Quién está hablando. Hablando de la Palabra de Dios hablada; Dios me habló allá en la Sierra; voy a sacarte de este lugar y ponerte en un lugar ancho y hacerte llevar fruto y fruto que permanece. Lo oí, en mi oído, la voz estaba en el aire, ¡lo oí! Luego semanas más tarde, me habló y dijo; este es el lugar a donde ir, Él nos trajo a esta frontera; esta vez entró por mi espíritu, no por percepción auditiva y sobre esta Palabra de Dios hablada, vendimos nuestra casa en La Junta, vendimos todos nuestros muebles, nos mudamos a esta frontera norte y aquí vendimos la camioneta de doble tracción sabiendo que ya no era necesaria. Aún no sabíamos qué, o cómo, o cuándo, pero porque Él había hablado y por Su gracia, entramos en la aventura de la vida de fe, una vez más. Vender tu casa, tus muebles, mudarte de donde has vivido por tantos años, luego vender el vehículo, con una convicción y certeza sobre la Palabra de Dios hablada. Pero, recuerden, requirió una Palabra de Dios, de lo contrario hubiera sido un paso de altísimo riesgo, con un por ciento o menos de probabilidad, que sucediera algo bueno. Pero Dios había hablado; así que la fe es por el oír, viene por el oír, existe por el oír y el oír por la Palabra de Dios. Busca, lee y escucha las Escrituras que es la Palabra hablada de Dios, para que tu fe, ¡nuestra fe!, crezca. Solo así podremos ver milagros otra vez. VAMOS A ORAR Padre celestial queremos que se haga Tu voluntad aquí en la tierra, así como se cumple en el cielo. Haz Tu voluntad en nuestras vidas, como se hace en el cielo. Queremos crecer en nuestra fe. Queremos aprender a oír Tu voz. A escuchar Tu Palabra hablada que nos haga avanzar en la fe, para ver Tus grandes obras suceder en nuestras vidas. Padre, ven sobre las congregaciones en México y que Tu Espíritu Santo nos provoque a celo por TU Palabra, por Tu presencia y por las cosas de Tu reino. En el nombre de Jesús, amén. |
Ver Mas |
En Busca de la Fe Vanguardista #5 |
FE POR OÍRLa gloria postrera será mayor que la primera, es lo que dice Dios en Su Palabra y pedimos que esta Palabra se cumpla aquí, en nuestras vidas y en la iglesia mexicana. En el nombre de Jesús, amén. Continuamos nuestra serie: En busca de la Fe vanguardista. En nuestro estudio hemos visto que hay una medida de fe impartida, un don de fe; fe que crece como un grano de mostaza, poca fe, hay fe que mueve montañas y más; mucho mas.Voy a leer una parte de un testimonio que me enviaron unos hermanos de San Luis Potosí, dice: “Queremos compartirle un testimonio que sucedió el domingo. Acá todas las casas tienen una cisterna de agua. Un niño como de 4 años cayó dentro de la cisterna, estuvo como siete minutos adentro, hasta que el pastor se dio cuenta y lo sacó. La iglesia comenzó a clamar por un milagro de Dios, porque el niño había muerto, Dios respondió y el niño resucitó a los pocos minutos. Los médicos no pueden creer lo que sucedió ya que el niño no tiene ninguna secuela, está en perfecto estado”. ¡Gloria a Dios! La televisora local va hacer un documental de los hechos, ya que ellos comentaron que siempre se dan malas noticias en televisión y ellos quieren que todos sepan que sí ocurren milagros. En Hebreos 11:1 leemos: Es, pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve. Certeza y convicción. La fe es la certeza de lo que se espera; cuando alguien está esperando algo que no ha sucedido, pero tiene la certeza de verlo suceder, esto es fe. También, la convicción de lo que no se ve… todavía. La Biblia en Romanos 10:17 dice: Así que la fe es por el oír, y el oír, por la palabra de Dios. En español, los que tradujeron la Biblia pusieron “es”, en griego realmente dice: “Así que la fe por el oír”. Es por el oír, viene por el oír, existe por el oír. Fe por oír, oír la Palabra de Dios, la Palabra escrita, léela, conócela; si quieres que tu fe crezca, entonces necesitas conocer la Biblia. Les he dicho que lean Mateo, Marcos, Lucas, Juan, Hechos y luego que repitan, y lo repitan, porque yo sé lo que puede hacer con tu fe. Usted dice; pero no tengo mucho tiempo. ¿Tienes 5 minutos en la mañana? O, ¿en la noche? Entonces empieza a hacerlo; después te vas a encontrar enamorado de la Palabra y el nivel de tu fe va a ir hacia arriba. El texto bíblico dice; “así que la fe es por el oír, y el oír, por la palabra de Dios”. Hay que aprender a reconocer Su voz, la Palabra hablada por Dios, aprende a distinguir si la voz viene a tu mente o a tu espíritu. Si viene a tu mente; entonces, puede ser solo un pensamiento, pero cuando aprendes a reconocer la voz de Dios en tu espíritu, entonces tú sabes Quién está hablando. Hablando de la Palabra de Dios hablada; Dios me habló allá en la Sierra; voy a sacarte de este lugar y ponerte en un lugar ancho y hacerte llevar fruto y fruto que permanece. Lo oí, en mi oído, la voz estaba en el aire, ¡lo oí! Luego semanas más tarde, me habló y dijo; este es el lugar a donde ir, Él nos trajo a esta frontera; esta vez entró por mi espíritu, no por percepción auditiva y sobre esta Palabra de Dios hablada, vendimos nuestra casa en La Junta, vendimos todos nuestros muebles, nos mudamos a esta frontera norte y aquí vendimos la camioneta de doble tracción sabiendo que ya no era necesaria. Aún no sabíamos qué, o cómo, o cuándo, pero porque Él había hablado y por Su gracia, entramos en la aventura de la vida de fe, una vez más. Vender tu casa, tus muebles, mudarte de donde has vivido por tantos años, luego vender el vehículo, con una convicción y certeza sobre la Palabra de Dios hablada. Pero, recuerden, requirió una Palabra de Dios, de lo contrario hubiera sido un paso de altísimo riesgo, con un por ciento o menos de probabilidad, que sucediera algo bueno. Pero Dios había hablado; así que la fe es por el oír, viene por el oír, existe por el oír y el oír por la Palabra de Dios. Busca, lee y escucha las Escrituras que es la Palabra hablada de Dios, para que tu fe, ¡nuestra fe!, crezca. Solo así podremos ver milagros otra vez. VAMOS A ORAR Padre celestial queremos que se haga Tu voluntad aquí en la tierra, así como se cumple en el cielo. Haz Tu voluntad en nuestras vidas, como se hace en el cielo. Queremos crecer en nuestra fe. Queremos aprender a oír Tu voz. A escuchar Tu Palabra hablada que nos haga avanzar en la fe, para ver Tus grandes obras suceder en nuestras vidas. Padre, ven sobre las congregaciones en México y que Tu Espíritu Santo nos provoque a celo por TU Palabra, por Tu presencia y por las cosas de Tu reino. En el nombre de Jesús, amén. |
Ver Mas |