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Por:
Victor y Gloria Richards
Martes 2 de Noviembre, 2021
Capítulo 2
Los opuestos se atraen
Hasta ahora, nos hemos concentrado en las diferencias básicas que tenemos según nuestro sexo, pero allí sólo comienzan las diferencias. Obviamente, no todos los hombres son iguales, ni todas las mujeres son iguales. Cada persona tiene su propia personalidad, su propia manera de pensar y actuar. Veamos ahora algunas de esas otras diferencias que pueden existir en una pareja, no según su sexo, sino según su personalidad. Es importante recalcar que una manera de ser no es mejor que la otra.
Extrovertido... introvertido
Estos son dos extremos de carácter que tienen que ver con nuestra manera de relacionarnos con la gente. Se pueden describir de la siguiente manera:
Extrovertido
Toma su energía del contacto social, por lo que prefiere estar con otras personas la mayor parte del tiempo. La interacción con otros “carga sus baterías”. Los períodos largos de soledad se le hacen pesados. Necesita el estímulo de las relaciones y disfruta al iniciar y mantener muchas de ellas. Esto es lo que lo mantiene renovado y lleno de vitalidad.
Introvertido
Toma su energía de la soledad, por lo que prefiere pasar mucho tiempo a solas. Las horas de quietud le dan las fuerzas. Si pasa demasiado tiempo con otros, se agota emocionalmente. No es que no le guste la gente, sino que no la puede tomar en grandes dosis. Prefiere pocas relaciones importantes que muchos conocidos casuales.
Si un extrovertido se casa con un introvertido, tienen que aprender a respetarse el uno al otro; de otra manera, se fastidian y choca su manera de ser. Si van de vacaciones a un lugar donde no hay gente conocida, la introvertida lo disfruta mucho, mientras que la persona extrovertida, después de unos días estará tocando las puertas de los cuartos del hotel para saludar y conocer gente nueva.
Pensador (analítico)... emocional
Estas diferencias tienen que ver con nuestra manera de pensar y tomar decisiones. Como ya se mencionó, es más frecuente que los hombres sean analíticos, y las mujeres, emocionales.
Pensador
Toma decisiones basadas en una lógica clara y práctica. Considera las cosas de una forma fría y calculada y se fija en su causa y efecto evidentes. Si tiene sentido, lo hace. Claro y simple; blanco y negro. El pensador se interesa por la productividad, la eficiencia, el beneficio y el logro de metas. Si un director pensador debe tomar una decisión como el despedir a un empleado, decide lo que es correcto y lo lleva a cabo sin traumas.
Emocional
Basa sus decisiones en cómo afectará a las otras personas. Agoniza ante la posibilidad de una confrontación. Tiene gran capacidad de empatía. Puede llorar con los que lloran. Obviamente, el mundo necesita ambas personas.
Estructurado... No estructurado
Estas diferencias tienen que ver con la manera en que vivimos nuestra vida.
Estructurado
Prefiere una rutina. Le encantan las agendas, la organización, las fechas, el hacer planes. Se frustra con las interrupciones, las sorpresas y los cambios.
No estructurado
Prefiere ser espontáneo. Odia las rutinas, las reglas y evita los planes a toda costa. Quiere que su día sea una aventura, le gusta improvisar y a menudo es desorganizado. Recuerda: uno no es mejor, sólo diferente. Sin embargo, en un matrimonio los extremos no son buenos. Algunas personas son tan organizadas, con todo tan estructurado, que ni siquiera pueden disfrutar de las sorpresas.
Oímos de un caso real en donde los cónyuges casi se volvían locos el uno al otro. Florencia, una mujer espontánea, sugirió una noche a su esposo, un hombre sumamente organizado y estructurado, que salieran a tomar un café. Él respondió, “Si me hubieras avisado desde la mañana, lo hubiera programado en mi agenda para este día, pero ya es demasiado tarde”.
Diferencias en la manera de expresar amor
Cuando no hay comunicación, el esposo(a) expresa su amor como se imagina que le gusta al cónyuge, y puede prestarse a serios malos entendidos.
Juanita pensaba que la mejor manera de comunicar su amor a Roberto era prepararle platillos exóticos y así lo hizo por años. Por fin, Roberto se animó a decir a su esposa que a él no le interesaban estas comidas tan sofisticadas. Lo que más le interesaba era que ella se sentara y platicara con él, que le animara y le dijera que era un hombre maravilloso.
El hombre, siendo práctico y lógico, compra una maceta para su esposa porque dura más tiempo que una flor. Pero algunas mujeres, siendo sentimentales, prefieren una flor. Cuando ella parece ser malagradecida por la maceta, el esposo se queja: “¿Quién puede entender a una mujer?”.
Diferencias en cuanto a temperamento
En el libro “Amistad e intimidad”, se trata en detalle sobre los diferentes temperamentos: Sanguíneo, colérico, melancólicos y flemático. Por tal motivo no entraremos en detalle ahora, pero estas diferencias también pueden crear serios problemas.
La sanguínea, que es sociable y comunicativa, se casa con el flemático que es serio y no habla. Quizá cuando apenas se conocieron, a la “aventurera” sanguínea le atraía el “misterioso” flemático. Pero ahora, casada con él, ¡se desespera!
El colérico, con fuertes opiniones, se casa con la persona melancólica que a veces parece ser pasiva. Sin embargo, después de la boda, se da cuenta de que su esposa tímida es de carácter fuerte y con una forma de pensar muy difícil de cambiar.
Decide gozarte y apreciar las fuerzas del temperamento de tu pareja y aceptar sus debilidades si deseas tener un matrimonio al máximo.
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